Vamos a partir en cuanto a la experiencia por comentar que aquel barrio en donde el pequeño niño vivía es actualmente en donde yo vivo desde hace 5 años.
El solo hecho de venir de región me ha preparado a afiatar lazos aun mas cercanos al sector, por la razón de intentar encontrar todo lo que necesitaba en los lugares mas colindantes. Si bien el ejercicio no dejo de sorprenderme en diferentes aspectos, me llevó a estrechar netamente una relación con la urbanización en lo que respecta a un sentido visual como por el ejemplo encontrar que aun existe construcciones de tales años o que simplemente ya no existen, pero que en mi memoria visual si estaban, por lo tanto en 5 años el cambio de una ciudad puede ser rotundo.
La búsqueda de huellas en la ciudad se nos hace complicada, pero todo se termino convirtiendo como en casi un juego, con ganas de encontrar cada pequeño espacio que esta película nos desplegaba. La información se hizo confundir por un aspecto en particular “el color” por lo que las formas y las estructuras son nuestro primer punto de partida.
Las nuevas construcciones y su exagerada amplitud van acortando cada vez mas nuestro visualidad a distancia lo que provoca en los usuarios una falta de sentido y orientación. Es por esto que estamos mas constantes a perdernos en la ciudad, la publicad tanto en tu cantidad como en su tamaño nos invaden de información innecesaria que no hacen mas que vaciarnos de exploración.
"...los suburbios existen sin un pasado racional y sin los "grandes acontecimientos" de la historia. Oh, quizá haya algunas estatuas, una leyenda y un par de curiosidades, pero no hay pasado; sólo lo que pasa por ser futuro. Una utopía sin fondo, un lugar donde las máquinas no funcionan, el sol se ha convertido en vidrio...".
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